De los resultados dados a conocer, se tiene que en las escuelas de nivel medio seis de cada 10 menores ejerce bullying, y de ese número tres son reincidentes.
Lo anterior fue dado a conocer durante la presentación de los resultados del Proyecto Bullying y Acoso Escolar, desarrollado en escuelas secundarias del municipio, en coordinación con el Centro Nacional de Prevención del Delito y Participación Ciudadana del gobierno federal.
De las agresiones más recurrentes que se realizan, 60 por ciento corresponde a poner apodos, seguido de robar la mochila, gritar al menor y faltar el respeto.
El estudio en este caso se realizó a 438 niños de dos escuelas, en tanto que el proyecto de adicciones estudiaron cuatro escuelas, en el polígono más crítico, que es en la escuela Castellanos, Escuela Luis Mora, Nezahualcóyotl y la Escuela Cuitláhuac.
El modelo forma parte de la estrategia nacional #Basta, impulsado por la presidenta con licencia, carolina Monroy del Mazo, y de acuerdo con la Fundación, el modelo aplicado en la demarcación ha demostrado que, tras su aplicación, se registran descensos de hasta 50 por ciento en el número de jóvenes que practican el bullying o el acoso escolar, lo que demuestra la efectividad de la estrategia.
El Proyecto Bullying y Acoso Escolar se realizó en las secundarias Cuitláhuac y Rosario Castellanos, donde un equipo de especialistas desarrolló talleres, actividades y dinámicas en los que participaron 213 alumnos, profesores y padres de familia, en temas culturales, equidad de género y derechos humanos.
Particularmente el municipio se encuentra entre los de menor violencia, en una estadística "media baja", por lo que estimó que todavía se puede arreglar el problema con talleres dirigidos a los padres de familia.
En este caso fue lo que se aplicó durante el proyecto, se les dieron pláticas de cómo educar a los hijos, cómo saber si su hijo es "buleado o buleador", técnicas para que los chicos platiquen con ellos; porque muchas veces pasa que los padres llegan cansados de trabajar, no acuden por las boletas de calificación, no hay comunicación, hay mucho cibernet, teléfono celular, whatsapp, y lo que se requiere es comunicación.
Ante el presidente por ministerio de ley, Elías Rafful Vadillo, el presidente de la fundación especificó que de los seis casos de chicos que "bulean", si son apoyados con talleres o pláticas, sólo 3 vuelven a hacerlo.
Asimismo, también aclaró que la diferencia entre sexos es muy poca, las niñas tienen un comportamiento de decir majaderías, de faltar el respeto, porque hay faltas muy graves, de carecer de reglas en el hogar, "sin reglas de conducta de convivencia no puede haber nada".
Los factores que inciden en la conducta de los adolescentes pueden ser endógenos y exógenos lo que viven dentro del hogar y la convivencia con los chicos de rededor del hogar, con chicos que traen problemas de soledad, de adicción, de temas que explotan.
"Cuando los chicos buscan asociarse a una pandilla o grupo, se identifican en que son hijos de madres solteras, en que los padres trabajan, en que su papá es alcohólico, y esos factores exógenos, de la calle los atrapan".
Ledezma Arriola puntualizó que el problema del bullying empieza en los jóvenes de 16 a los 18 años, y es muy difícil que un joven de 18 años deje de hacerlo, porque ya trae un parámetro de formación.
Los especialistas esperan realizar una tercera etapa, donde se pueda dar tratamiento psicológico a chicos que están más allá y tienen una fuerte marcación psicológica.
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