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miércoles, 3 de octubre de 2012

Diálogo político

Por José Luis Ortega Pérez

Reprime la policía capitalina a jóvenes y al ex diputado Fernández Noroña, durante el plantón en el Senado en protesta por la reforma laboral.

Por un lado Ebrard repudiaba la matanza de Tlatelolco y por otro sus granaderos lanzaban gas lacrimógeno a estudiantes.

El PRD manifestó su desacuerdo con la represión; es la peor manera de conmemorar el 2 de octubre”, afirmó la senadora perredista Iris Vianey Mendoza.

Encabezados por su coordinador, Miguel Barbosa, los senadores perredistas se comprometieron a votar en contra de la reforma laboral aprobada por la Cámara de Diputados.


Senado de la República, Méx.- Mientras Marcelo Ebrard recordaba el 44 aniversario de la matanza del 2 de octubre y en su mensaje decía a los jóvenes de hoy que los jóvenes que participaron en el movimiento estudiantil de 1968 demostraron que cuando se tiene la razón, finalmente se va a triunfar, en el senado, su policía reprimía a los jóvenes que protestan contra la reforma laboral.

Ayer en el museo de la Ciudad de México, ante intelectuales y políticos de izquierda, como Elena Poniatowska, Gilberto Guevara Niebla y Salvador Martínez della Rocca, el jefe de gobierno del DF, pidió a la juventud no descorazonarse ante la nueva coalición conservadora y dinosáurica que tiene frente a sí el país, pero en otro lado mandaba el mensaje represivo de que no permitiria protestas estudiantiles. ¿Qué inconsecuencia?

Ebrard mostró dos caras ayer; una que se dice de izquierda y que ayer le decía a los jóvenes que no se desanimaran, que la lucha sigue y la otra de obediencia a la petición del presidente de la Mesa Directiva del Senado, Ernesto Cordero, ex funcionario del gobierno de Calderón que un día dijo que se podía vivir muy bien con seis mil pesos mensuales, de apoyar el acceso de los senadores al edificio de Reforma e Insurgentes a fin de que pudiera iniciarse la sesión del Senado donde se arrancaría el proceso legislativo para la discusión de la reforma laboral aprobada por la cámara de diputados.

Ebrad ni tardo ni perezoso atendió la petición panista, no importando que ello significara reprimir a los jóvenes del movimiento yo soy 132 que bloqueban los accesos del recinto legislativo para evitar que los senadores pudieran sesionar y dieran entrada a la Reforma laboral de Calderón aprobada en la Cámara de diputados, que lesiona los derechos de los trabajadores.

Durante los jaloneos que se suscitaron para que los senadores pudieran ingresar, varios manifestantes fueron golpeados y agredidos con gas lacrimógeno. Entre los afectados por el gas y los golpes está el ex diputado Gerardo Fernández Noroña, uno de los organizadores del “sentón” frente al Senado.

El gas lacrimógeno fue lanzado por los policías sobre los manifestantes que estaban en la calle París, esquina Madrid, en la colonia Cuauhtémoc de la Ciudad de México. Las autoridades abrieron paso a un grupo con alrededor de unos 40 senadores en seis camionetas. La mayoría eran panistas pero también había priístas. Los granaderos les abrieron paso en las calles antes mencionadas sin problema alguno.

Antes de iniciar la sesión ordinaria, el presidente del Senado, el panista Ernesto Cordero, manifestó: “respetamos las manifestaciones, pero los senadores tenemos que cumplir nuestro trabajo y nuestra responsabilidad, no podemos suspender labores, el país demanda nuevos ordenamientos”.

Agradeció el apoyo del Gobierno del Distrito Federal, encargados de garantizar la seguridad y el libre acceso al recinto, y dijo que esperaba que los apoyara todo el mes, que dure el debate senatorial sobre la reforma laboral.

Por su parte, el presidente de la Junta de Coordinación Política, el priísta Emilio Gamboa, aseguró en conferencia de prensa que “vamos a escuchar a todos los líderes obreros, de cualquier corriente, escucharemos también a los empresarios, el Senado estará abierto para escuchar a todos”.

Cerca de las 12 horas la sesión se dio por iniciada, luego que pudieran ingresar senadores suficientes para alcanzar el quórum requerido (65 legisladores) y llevar al cabo la sesión.

La minuta llegó a las 20:30 horas de este lunes y el plazo correspondiente correrá a partir de que la Mesa Directiva de la Cámara alta la turne a comisiones.

Las comisiones que debatirán el dictamen, aprobado la madrugada del sábado en la Cámara de Diputados, son la del Trabajo, presidida por Ernesto Gándara, del Partido Revolucionario Institucional, y la de Estudios Legislativos Primera, encabezada por el panista Raúl Gracia.

Durante la sesión del Senado, la senadora perredista Iris Vianey Mendoza, protestó por la represión a la ciudadanía que se cometió fuera del recinto legislativo. “El PRD manifiesta su desacuerdo con esta decisión y les decimos que es la peor manera de conmemorar el 2 de octubre”, afirmó tajante.

Ante, los senadores perredistas participaron en el mitin que diversas organizaciones realizaron frente al Senado de la República. Encabezados por su coordinador, Miguel Barbosa, los legisladores se comprometieron con los manifestantes a votar en contra de la minuta de la reforma laboral aprobada por la Cámara de Diputados.

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